lunes, 13 de febrero de 2017

La Bolsa o la vida

En honor al reciente premio Planeta, Eduardo Mendoza, publico este post bajo este título tomado, en parte, de una de sus novelas.
Y es que para unos cuantos la Bolsa es su vida, para otros es un pasatiempo donde poner en juego sus supuestos conocimientos de economía y, para la mayoría no influye para nada en sus vidas. Es un indicador más de la vida económica que si sube es buena señal y si baja mala.
Pero ¿qué se esconde detrás del intrigante mundo de la Bolsa? ¿Por qué todos los que tenemos alrededor parecen conocerla muy a fondo e incluso utilizan palabras crípticas para hablar de ella como un lenguaje reservado sólo a ciertas esferas de la población? Y, esto es lo mejor, ¿por qué ninguno de los que tanto saben de Bolsa están amasando una fortuna de proporciones incalculables?
La Bolsa es, o por lo menos eso pretende, un mercado perfecto, donde oferta y demanda coinciden en el punto en que se produce el máximo beneficio tanto para el oferente como para el demandante.
Así, si yo compro unas acciones de la empresa "X" en Bolsa lo haré al menor precio posible de cuantos me oferten. Y, a la inversa, si quiero vender unas acciones de la empresa "Z" en Bolsa lo haré al precio máximo que alguien sea capaz de pagar.
Si vamos un paso hacia atrás acerca de mi decisión de comprar o vender, tenemos que preguntarnos "¿por qué compro acciones de la empresa "X" y no compro las de la empresa "Y"? La respuesta, como casi siempre, no es fácil de razonar, pero el argumento básico que subyace en mi decisión es qué empresa va a generar mayor rentabilidad a mi inversión.
Ya, ¿y eso cómo lo puedo averigüar? Bueno, enfrente de mi oficina venden bolas de cristal muy baratas, aunque, la verdad, poco eficaces...
Pues realmente saberlo con certeza es imposible, sólo podemos analizar las empresas y prever su comportamiento en el futuro.
En la medida que los datos que escojamos para analizar la empresa sean relevantes, los interpretemos adecuadamente y hagamos unas previsiones más ajustadas, nuestra rentabilidad será mayor. Fácil, ¿verdad?
Evidentemente todo es más complejo, porque hay mucha informacion que analizar, por no hablar de los grandes inversores que pueden influir en el mercado. Pero, la base del comportamiento de este mercado "perfecto", está en el análisis y el acierto en las predicciones.